Hay una costumbre muy extendida por la zona de la calle de nuestro garaje. Cuando hay alguna obra o alguna mudanza (como hoy) en alguna de las casas contiguas, el de la furgoneta se saca una valla de la misma y la coloca al principio de la calle. Y claro, cuando llegas tú intentando entrar al garaje, pues como que no puedes.
No es la primera vez que pasa, y seguro que tampoco será la última. Y si llamas a la Policía para preguntar si hay alguna obra o permiso licitado allí para la valla y el corte de la calle, te encuentras conque trabajan de 9 a 2, y que a partir de las 2, si quieres siembra el campo de flores.
Pasa lo mismo que con la grúa, que con cuatro para la ciudad entera poco podemos hacer, cuando deberían estar retirando unos cuantos miles de coches mal aparcados al día, y ni siquiera salen de cocheras. Ya podían utilizarlo como recaudación municipal, en vez de ponernos multas por tonterías.
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