Bi0[x]iD's WaY oF LiFe

Un blog a 60 pulsaciones por minuto


Crisis de oportunidad

¿Qué pasa cuando se te presenta una oportunidad? ¿Qué pasa cuando se presenta la oportunidad de tu vida? ¿Qué pasa por tu cabeza en esos momentos?

Estos dos últimos meses han sido complicados. Uno de esos momentos de la vida en los que estás en una situación difícil de la que no tienes muy claro cómo salir. Han chocado en mi cabeza montones de cosas. He creado montones de situaciones y de escenarios posibles entre deseables, reales e irreales.

He pensado en cómo sería vivir fuera de aquí. En cómo podría organizarme, y hasta dónde podría llegar, estando en otro país. Mis conexiones familiares, a día de hoy, pasan por el teléfono y por internet. Y me gusta viajar. En ese aspecto no estaría muy atado. Pero… ¿quiero hacerlo?

Hace unos meses pasé por un proceso de selección para una gran empresa. Fueron muchos días de ilusiones, de proyectos, de reorganización, de esperanzas en el futuro… También de un buen sueldo. Y en el proceso de selección, que tardó más de lo esperado, me dio tiempo a darme cuenta de que iba a fallar. Y no sólo eso. También me di cuenta de que quería fallar. Que es muy fácil mirar hacia adelante y dejarlo todo atrás. Pero soy quien soy, lo que soy, gracias a todo lo que he pasado en mi vida. Un pasado no siempre fácil, que me ha ayudado a aprender a cada paso y que me hace estar seguro de qué quiero hacer y qué quiero ser en el futuro.

En todo este proceso también aprendí mucho.

En los últimos dos meses he rechazado ofertas de trabajo de Argentina, Nueva York, Holanda, San Francisco y Francia. He tenido, y tengo, el currículum y la carta de motivación preparadas para el proceso de selección de Atlassian que presentó David Bonilla. Lo he preparado a sabiendas de que no lo voy a entregar. Pero lo necesitaba como ejercicio de afianzamiento personal.

Porque llevo cuatro años trabajando en esto. Llevo muchas horas de sueño dedicadas a este proyecto. Este proyecto se llama mecus, y lleva detrás la experiencia de trabajo de otros cuatro proyectos anteriores, siete años de experiencia en WordPress,  y 14 años de experiencia en sistemas LAMP. Puedo decir que conozco el software y el lenguaje de programación que utilizo a diario casi desde que nacieron. Soy especialista en lo que hago. ¿Quiero cambiar todo esto? ¿Quiero abandonar esta gran ventaja sobre los demás por un sueño? 

Tenemos una página que no se actualiza. Tenemos parados los seminarios gratuitos. Tenemos el sistema de tickets lleno de ideas por realizar… Hay cosas que quiero cambiar, por supuesto. Pero quiero cambiarlas dentro.

Me gusta mi trabajo. Me gusta lo que hago. En mi currículum hay muchas cosas, pero lo que más me gusta es que puedo definirme como evangelista y artesano. Puedo ayudar a la gente a conseguir lo que quiere, a proyectar sus ideas, a definir sus objetivos. Y puedo fabricarles herramientas a medida para que lleguen a la meta.

He conseguido un entorno de trabajo en el que, a diario, todo son risas. En el que no paramos de aprender. En el que nos divertimos. En el que trabajamos en proyectos propios. En el que no nos vamos a hacer ricos, pero tampoco nos importa, porque somos felices.

He conseguido un entorno de trabajo en el que los clientes se convierten en amigos. En el que forman parte del equipo.

He conseguido un entorno basado en la meritocracia. Mecus no es una gran empresa, y posiblemente nunca lo será. Los grandes somos nosotros, independientemente de donde trabajemos. Esto es algo que Automattic, la empresa madre de WordPress, lleva enseñándome cinco años. Cuando pienso en WP VIP, pienso en Sara Rosso y en Alex @viper007bond. Cuando pienso en UI, pienso en Jane Wells. Cuando pienso en el cerebro, pienso en Matt. Cuando pienso en código, pienso en Nacin y en Otto. Cuando pienso en internacionalización pienso en Zé y en Nokolay. En diseño, en Lance, Matt y Hugo. El P2, que revolucionó tanto la hora de comunicarse, siempre lo asociaré con Noel, que ya no trabaja allí. Y seguirán todos siendo igual de grandes trabajen donde trabajen.

Este entorno lo he conseguido con la ayuda y participación de dos personas: Rocío, impresionante desarrolladora, y Luis, constante inquisidor (no de represor, sino de preguntón) que nos ayuda a aprender y seguir cada día. Este entorno ha mejorado notablemente desde nuestra participación en la WPOnTour, donde nos sentimos arropados por todos los participantes. Donde volvimos a darnos cuenta de que, aunque estemos en España, y en Andalucía, nuestro modelo no está equivocado.

El último evento en Sevilla, el Open Space, ha vuelto a reafirmarme en que hay gente muy buena por aquí y que hay empresas y personas locales (BitRock,  Klicap, Kitiplá, OpenMelva, Syderis, Abel Sutilo, Pablo Escribano, Nilo Vélez…) y otras no tan locales (theEvnt, JM Beas…) que son más que suficientes para hacer que nos demos cuenta de que aquí hay mucho potencial.

He tomado una decisión. Una de las más importantes de mi vida. Puede que sea también la crisis de la edad, estoy a sólo unos días de los 30.
La decisión parece sencilla. No lo es tanto cuando en tu correo hay ofertas sustanciosas que te permitirán llegar más alto, más lejos, y tener el bolsillo más lleno. Pero todo se ve más claro cuando tienes claro tu objetivo. Porque hace unos años mecus se convirtió en ese sueño al que no quiero renunciar, y es el proyecto que no quiero abandonar. 

Me quedo en Sevilla. Voy a seguir pensado que aquí tenemos un gran futuro, y voy a trabajar por él. Una vez mi padre me dijo que no llegaría a ningún sitio teniendo pajaritos en la cabeza. Mi madre, a su vez, me instó a que persiguiera mis sueños. Concreté, definí, y perseguí. El trabajo ha hecho que los caminos de Luis y Rocío se hayan unido con el mío, y seguirán juntos al menos durante un tiempo, porque tenemos un objetivo común. Tenemos las herramientas, las ganas y la ilusión. Después de cuatro años se empieza a ver el resultado de los proyectos propios, y nos vamos acercando a nuestra meta. ¿Que cuál es?

Cambiar el mundo. Juntos. Sin dejar de divertirnos.

Este artículo llevo rumiándolo un tiempo. Lo he escrito ahora como ejercicio para una sesión de mentoring que tengo mañana con unos amigos. Motivación no les falta, y también quieren cambiar el mundo.



31 respuestas a «Crisis de oportunidad»

  1. Muy bueno el artículo, yo estoy en una situación «inversa», en la disyuntiva de dejar una vida de comodidad por empezar algo propio con una ilusión renovada aunque sea a costa de esa dudosa comodidad.

    Por cierto, unque en la charla del OpenSpace pareciera que denostaba a WordPress para entornos productivos complejos (incluso creo que con drupal dio esa misma sensación), el caso es que me quedé con ganas de conocer algo más de las posibilidades de extensión que ofrece, así que a ver si en la próxima podemos entrar en más detalle.

    1. Dentro de poco reactivaremos los seminarios gratuitos sobre WordPress, así que será un placer tenerte por allí 🙂

  2. Jó, como escribas más artículos así me vas a hacer emocionar y voy a echar por tierra mi fama de tipa dura :P. Ahora en serio, todo lo que sé ahora ha sido gracias a tí y a Luis, y es un placer trabajar todos los días entre risas e ilusiones por lo que hacemos. Gracias a los dos por ser como sois.

    1. Gracias a ti por las risas espontáneas y por los momentos absolutely random 😛

  3. Claramente, Rafa, tenemos que hablar más, este post es buenísimo, y lo es por lo que transmite. ¡Hagamos cosas!

    1. Por aquí tenemos unos cuantos eventos en marcha, y estoy dispuesto a más 🙂

      Cuando quieras vemos qué podemos montar por allí 😀

  4. Enorme el texto, enorme el sentimiento.

    Gracias por tus palabras y por tu esfuerzo continuo.

  5. Ya hemos hablado muchas veces sobre si huir o si seguir luchando, por dura y, a veces, poco satisfactoria que sea la tarea, en los proyectos que ahora tenemos en marcha.
    Decidas lo que decidas, viniendo del corazón, como todo lo que haces, cosa que te convierte en alguien muy especial… no tengo duda de que tendrás éxito y, por supuesto, te animaré a ello.

    1. Huir no es una opción. Sí lo es progresar en otros espacios. Pero, por ahora, vamos a ver qué conseguimos desde aquí 😉

  6. Te admiro. Es lo mejor que puedo decir después de leerte. Admiro tus ganas, tu fuerza, tu convicción, tu fe en tí mismo, tu confianza y tu seguridad. Soy sincera si te digo que casi se me han saltado las lágrimas. Me has hecho pensar. Al final, todo se reduce a ser feliz con lo que haces. Al margen del dinero. Sueño con ser capaz de decir un díalo que has dicho tú. Lo importante es la gente de la que te rodeas y la convicción de que estás haciendo lo que quieres y eres feliz con ello.

    1. Lo que hay que hacer es ponerse manos a la obra. En realidad no cuesta tanto. Es sólo tener claro el objetivo final y lanzarse a por él. Algo al alcance de todos 😉

      ¡Bebed muchas san patricias a mi salud este finde!

  7. Seguro que vamos a hacer más cosas, cuanta gente buena hay por aquí.

    Por cierto hablamos la semana próxima que necesito una inyección de Mecus Power 😉

    1. Cuando quieras 🙂 ya sabes dónde estamos 😀

  8. Yo también le admiro, caballero. Le admiramos. Es usted admirable. No almirante. Ofú, estoy todavía resacoso.

    1. Cuida ese hígado 😉 Espero que nos veamos pronto, que hace mucho que no coincidimos.

  9. Veo que seremos los que nos quedamos aquí los que al final salimos ganando. 😉

  10. Pues no sé si es porque me encuentro en en esa incertidumbre que has conseguido solventar, si es porque estoy convencida de que puedo ser feliz aquí y es lo que quiero pero son muchas las trabas que me estoy encontrando, o porque, sencillamente, soy una sensiblona pero estoy con los ojos a punto de llorar.

    Me alegro mucho de tu decisión, de seguir teniéndote cerca, de que Mecus siga adelante con futuro y de que seáis tan valientes.

    Te mereces, como poco, que te mande un beso como un tonel.

    1. Como decía por ahí abajo, la cosa es tener la meta clara. Trabas hay millones. Peleas por cobrar, casi a diario. Pero tenemos que ser como El Corte Inglés. Asumir que aquí se roba, aunque no nos guste, y buscar la forma de seguir adelante.

  11. Ya te he contestado en el post de la oferta a la que no vas a aplicar.

    No creo que sea una oportunidad perdida, en absoluto. Ese trabajo en Australia es una GRAN oportunidad para un buen programador con ganas de hacer cosas.

    El ¿problema? es que tú no eres un GRAN programador, eres más que eso, otra cosa, ni peor ni mejor.

    Eres un emprendedor con las ideas claras, un proyecto y ganas de llevarlo adelante. Eres un reactivo y un catalizador para tu comunidad ¿Qué se te ha perdido en Australia, San Francisco o Londres?

    No se si te hubieran seleccionado para ese puesto. Tampoco se si me hubiera alegrado de que lo hubieran hecho…

    Un abrazo,
    David

    1. Pues para ese no. La verdad es que había preparado el curri para un puesto que no habíais ofrecido :P. Todo descrito para cubrir las dos necesidades de proyección, la de diseño de proyectos y la de proyección exterior, organizando una visión global.

      No creo que me hubieran cogido, pero te voy a preparar el documento igualmente por si te interesa para poder aplicarlo en un futuro.

      Y gracias por los halagos. Se hace lo que se puede 🙂

      1. Me interesa. Creo que es un documento del que puedo aprender.

        impaciente porque llegue al correo… ^_^

        1. Déjame que lo prepare un poquito más y le cambie el enfoque, y lo envío a tu bandeja de entrada 🙂

  12. […] ¡Maldita sea! Olvidé citar este emotivo artículo de Rafa Poveda (@bi0xid). […]

  13. Un gran post y una gran reflexión. Es difícil saber si es lo correcto o no, no creo que haya una respuesta ahora mismo pero si creo que ha sido una decisión valiente y una apuesta por tu propio talento. También pienso que hay gente muy buena, hay ganas de crear y hay ganas de hacer las cosas bien.

    Espero que si algún día me encontrase en una situación parecida sea igual de valiente, porque hay que serlo. Hay que tener muy claro lo que realmente quieres y apostar por ello, como tú has hecho.

    Gracias por este post tan motivador.

    1. Si es correcto o no puede que no lo sepa nunca. Lo que sí tengo claro es que si me quedo con el proyecto en el que tenga puesta más ganas, me motive más, y en el que más crea, podré hacer mucho más en él que en cualquier otro.

      Hay dos dichos que utilizamos siempre en los scouts que siempre tengo en mente. El primero, Piensa globalmente, actúa localmente. El segundo, si quieres cambiar el mundo, empieza por tu propia casa.

      Creo que es un buen punto de partida 🙂

  14. Me ha emocionado tu texto y comparto contigo ese sentimiento. Es duro, es dificil, pero si fomentamos una red, una de verdad, honesta, hecha entre todos los profesionales locales, podemos luchar para impregnar esta tierra de ese ideal profesional y dejarla a la altura de cualquier parte del mundo.

    Como se suele decir, lo fácil en una situación complicada es huir; el mérito y lo dificil está en sacar fuerzas para solucionarla ¡Aquí tienes a otro compañero preparado para la guerra! La Resistance!

    Gracias por la mención 🙂

  15. Me he quedado de piedra al leer los primeros párrafos de tu artículo. Pensaba que los había escrito yo y ya no lo recordaba. Enorme artículo, si señor.
    Me dejas mucho material para la reflexión.
    Espero que te vaya muy bien en tu «no nueva» andadura.
    un saludo.
    Nota.- No nos conocemos, pero he llegado a tu artículo por un tweet de David Bonilla.

  16. Por cierto, pasada mi sensiblería, caigo en la cuenta de que no he comentado las fotos que ilustran la entrada, jajajajajajajajajajajajaja.

  17. Se me caen las lágrimas, de alegría, leer tu emotivo post.
    En italiano se dice «Chi trova un amico, trova un tesoro» (Español: quien encuentra un amigo, encuentra un tesoro).
    Luis me habló de este post, habíamos hablado de la personalidad del emprendedor.
    Aunque cuando hablo suelo meter la pata, tu post me ha motivado para hablar y decir lo que pienso.
    En mi vida he tenido que luchar contra todo lo negativo que me han dicho y hecho, y yo no he sabido responder. Hace unos meses decidí alejarme de los que no me aportan nada y acercarme a aquellos que sí me transmiten amor. He decidido decir no, a aquellos que sólo se quieren a sí mismos. Ahora estoy trazando mi camino, como tú, y algún día mis amigos hablarán de ese camino. A lo mejor aún no sé lo que quiero, pero ya sé lo que no quiero. Mi camino lo trazaré con mis amigos y no con los que no lo son.

Responder a BeltránCancelar respuesta