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Mundo 2.0 Personales

Trabajar desde casa

Es curioso lo tradicionales que somos para algunas cosas.

Os voy a contar una historia, y vaya  personalizarla para contarla aquí (es decir, voy a contarla en primera persona).

Hace unos meses, en un trabajo realizado prácticamente online, el jefe se ausentó.

– Voy a estar un mes fuera.

¿Vas a estar un mes fuera? Entonces no vamos a poder revisar nada in situ. Así que la respuesta automática por mi parte fue:

– Bueno, entonces en este tiempo voy a trabajar desde otro país.

Os pongo en situación. Este trabajo me lo facilitó una compañera. Empezamos a trabajar allí, yendo a la oficina, hasta que el trabajo pasó a ser 100% online. Es decir, trabajo desde casa.

Y ahora la segunda situación: el jefe no va a estar durante un mes, no vais a poder veros en persona, así que decides cambiar tu casa por otro lugar más agradable para trabajar. Total, da lo mismo. Vas a trabajar igual. Y aquí viene la situación curiosa.

Resultado 1: El jefe te despide. «Si no vas a estar en al oficina…». ¡Si antes tampoco estaba! ¿Qué razón es esa? Si no ha cambiado nada…

Resultado 2: La persona que te ha facilitado el contacto y el trabajo, cuando se lo cuentas, tiene esta conversación contigo:

– Es que tú después de llevar sólo dos meses trabajando allí no puedes decirle que te vas dos semanas de vacaciones.
– No son vacaciones. Es trabajar desde otro sitio en vez de desde mi casa.
– Sí, como si en (introduzca aquí cualquier lugar) fueras a trabajar. Tú no puedes pedirle eso a un empresario. Tienes que estar en la oficina. Porque claro, un empresario… Tú no puedes hacerle eso a un empresario. Él te quiere en la oficina. Y no te confíes con tu próximo trabajo. Eso de trabajar desde casa es muy irregularNo lo hace nadie. Está mal visto y no aporta ninguna confianza al empresario.


Vivir todo esto desde la barrera ha sido como estar en una película de los años 90. Pero la cuestión no es que parece una película. La cuestión es que, como siempre, nosotros vivimos en nuestro pequeño universo y no reparamos en que esa es lo que realmente ocurre fuera de nuestra casa, habitación, oficina o slack. Un micromundo, un microuniverso, que es muy grande, sí, pero no es real.

Yo me moriré, y mi familia política no entenderá por qué me pagan por «estar ahí tiqui-tiqui-tiqui, si no haces nada». No es visible. No es real. No es tangible. No existe.

¿Y si nosotros tampoco existimos?

Habemus nueva tele

No he podido resistirme a hacer fotos del proceso ^_^.

la nueva tele - 1

la nueva tele - 2

la nueva tele - 3

la nueva tele - 4

la nueva tele - 5

😛

210 €

Dícese de la ayuda que el gobierno le da a los caseros para que se sientan más felices alquilando (lo que se traduce en que todos los pisos han subido 210€ su precio). 

casa hipoteca

Las compras caen. Personas normales, como tú y como yo, se han dejado hasta las pestañas para comprarse un piso de 270.000 € (unos 45 millones de las antiguas pesetas). Ahora se encuentran con que algunos pisos de la misma promoción no se vendieron, y ahora se están vendiendo por su precio real: unos 120.000 €

¿Qué cara se te queda cuando tienes que pagar 950,75 € al mes durante 40 años, (o 1.124,16€ al mes durante 30 años si no te la han concedido a 40 años), y sabes que tu vecino de enfrente está pagando una hipoteca a 30 años de menos de 500 € al mes?

¿No te sientes estafado? ¿Engañado? ¿Estúpido?

casa hipoteca

¿Por qué la gente no se queja? Porque ponen los pisos en alquiler. Hay que rentabilizarlos como sea. Y la mejor solución es subir el precio en 210 €. ¿La excusa? Total, pides la ayuda y listo. Si a ti te va a costar lo mismo…